Hola, hace mucho que no vengo por aquí, incluso creo que hay gente que me ha echado de menos, o al menos las cosas que pongo en este blog. Supongo que no habréis sido muchos.
Hoy voy a hablar de... bueno, no se. Simplemente me apetecía dejar constancia de esto en algún sitio, y no es algo como para escribirlo en papel... Es o eso o que soy muy vago y me resulta más fácil escribir en mi blog.
Me siento... mal, como si el mundo girara y yo no, como si el tiempo avanzase demasiado deprisa y yo no pudiese seguir su ritmo, o simplemente me hubiera cansado de ello.
Solo entre un montón de gente, como muchas otras veces a lo largo de mi vida. Se podría decir que como casi siempre. Ya nada consigue que me ilusione por ello.
Acabo de dejar echas bastantes obligaciones, y tengo otras tantas por hacer, pero nada consigue cambiar mi estado de ánimo. Estoy como, viendo el universo desde una ventana, sin... poder hacer nada para cambiarlo, ni tampoco me cobija ningún techo ya que la ventana no es más que una metáfora.
Sigo adelante, sí, pero ¿a qué precio? Si no tengo ilusión por apenas nada, ¿para qué seguir adelante? ¿Por qué seguir caminando, pensando... respirando?
Me rijo por mis obligaciones, trato de agobiarme para poder "evadirme" con ellas, que me hacen compañía. Compro y compro y eso no hace más que la sonrisa, la "cara a la galería" que pongo sea más falsa cada vez.
¿Qué debo hacer? ¿Cómo seguir? La vida en su conjunto ¿merece la pena? Más preguntas sin respuesta, ojala fueran respuestas sin pregunta. Ojala supiera... tantas cosas...
Hoy voy a hablar de... bueno, no se. Simplemente me apetecía dejar constancia de esto en algún sitio, y no es algo como para escribirlo en papel... Es o eso o que soy muy vago y me resulta más fácil escribir en mi blog.
Me siento... mal, como si el mundo girara y yo no, como si el tiempo avanzase demasiado deprisa y yo no pudiese seguir su ritmo, o simplemente me hubiera cansado de ello.
Solo entre un montón de gente, como muchas otras veces a lo largo de mi vida. Se podría decir que como casi siempre. Ya nada consigue que me ilusione por ello.
Acabo de dejar echas bastantes obligaciones, y tengo otras tantas por hacer, pero nada consigue cambiar mi estado de ánimo. Estoy como, viendo el universo desde una ventana, sin... poder hacer nada para cambiarlo, ni tampoco me cobija ningún techo ya que la ventana no es más que una metáfora.
Sigo adelante, sí, pero ¿a qué precio? Si no tengo ilusión por apenas nada, ¿para qué seguir adelante? ¿Por qué seguir caminando, pensando... respirando?
Me rijo por mis obligaciones, trato de agobiarme para poder "evadirme" con ellas, que me hacen compañía. Compro y compro y eso no hace más que la sonrisa, la "cara a la galería" que pongo sea más falsa cada vez.
¿Qué debo hacer? ¿Cómo seguir? La vida en su conjunto ¿merece la pena? Más preguntas sin respuesta, ojala fueran respuestas sin pregunta. Ojala supiera... tantas cosas...
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