domingo, 27 de abril de 2014

Revelaciones de domingo

Otra equivocación más, otro error, y ya he perdido la cuenta de cuántos van en los últimos dos años ¿Qué se supone que debo hacer ahora? ¿Me sigo dejando pisotear, como si no supiera nada de esto? ¿Sigo poniendo buena cara y aguantando comentarios "amables" llenos de veneno?
Estoy harto de condescendencias y de falsedades, de buenas palabras y puñales por la espalda. Harto de la puta competencia rastrera, en la que sólo se valora en qué puede uno aprovecharse de los demás. Ya no quiero las mil y una explicaciones cogidas con alfileres para tratar de justificar lo injustificable.
Que estoy condenado a que se ría de mí hasta el más inútil del lugar es algo que tengo asumido. Lo único que quiero saber es qué debo hacer ahora, porque ya no me quedan razones para seguirme equivocando...

2 comentarios:

Blood Like Lemonade dijo...

¿Qué queda? Aprender de esos errores, recordar lo que sentiste cuando los cometiste para poner todo lo que puedas de tu parte en que no vuelvan a suceder.
ánimo

twisen dijo...

El problema es cuando los errores se demuestran como tal por acciones de otras personas, inevitables, ya que si volviera a cada uno de los momentos en los que tome decisiones poco acertadas, y con la información disponible en aquellos momentos, habría tomado las mismas decisiones :S
Lo que lamento profundamente es corroborar una y otra vez lo despreciable que son casi todas las personas que nos rodean.