22 de diciembre, un día que en España mucha gente asocia a los sueños, porque se celebra el sorteo de la Loteria Nacional. Hace mucho que es más tradición que otra cosa porque, los premios que reparten no son, comparativamente, tan grandes como cuando se empezó a celebrar y cumplir sueños cuando te toca la lotería es bastante complicado. Pero aún así la gente sigue depositando su esperanza en el canto de los niños de San Ildefonso.
Hoy se va a hablar mucho de sueños. Van a salir muchas imágenes de gente "feliz" en los telediarios porque El Gordo les ha repartido unos cuantos millones. Desde luego los sueños de Hacienda, que sin haber comprado ni un solo boleto va a ser la que más gane, se cumplirán. Lo que no cuentan es lo que pasa después de recibir uno de estos premios y como la avaricia humana puede hacer que un momento como este se convierta en un error.
En cualquier caso, yo nunca he creído en "el poder de La Lotería" y siempre me toca el reintegro porque nunca juego nada. Yo ya he sido agraciado con un bonito sueño el día de los sueños, sueño que no se cumplirá, al menos no en su totalidad. Lo que no se cumplirá es, precisamente, lo que hace que sea un sueño pero como ya he dicho muchas veces, soñar es de las pocas cosas que no nos podrán quitar.
Suerte para todos los que tengáis números de lotería, y que vuestros sueños si que se cumplan.
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