Me despierto esta mañana leyendo una noticia que me horroriza al leerla. El "mamading" se practica frecuentemente en Salamanca, y no sólo eso, además cuenta con el beneplácito del ayuntamiento, algo completamente inexplicable en una ciudad que ha sido, y busca ser, capital cultural del mundo. Pero oye, que como lo de "la fiesta es cultural" está tan extendido, igual cuela y todo.
Para los que no lo sepan, el "mamading" es una práctica, que se puso de moda principalmente en Magaluf, que consiste en que los bares proporcionan copas gratis a las chicas que se comprometan a realizar felaciones a los chicos (clientes del bar, obviamente) que así lo deseen. Sí, algo que, a todas luces, se puede considerar "prostitución" como poco pero que muchas chavalas están deseosas de hacer por seguir ingiriendo el ansiado etanol.
No puedo entender qué lleva a un bar a proponer tal cosa, que lleva a los chicas a formar parte esencial de ello y... sobre todo, no entiendo cómo pueden los chicos participar en ello. Y no se me tiren los feminismos encima, que soy el primero que opina que es denigrante y asqueroso para las mujeres el mero hecho de proponerlo pero, si se hace es porque dos (o 3) partes participan y muchos otros lo consienten. Y en este caso es que no alcanzo a comprender que placer pueden obtener "los tíos" de esta forma. Vale, la parte fisiológica... pero... definitivamente no creo que compense.
En fin, no os quiero aburrir más con disquisiciones que no llevan más que a demostrar, una vez más, mi desagrado con la humanidad en general y con los jóvenes en particular. Yo no debía de haber nacido en esta época, eso está claro. Espero que, de una forma o de otra estas prácticas desaparezcan de nuestra querida ciudad, que ya tiene bastante con "las despedidas", las asquerosas macrofiestas, y las fiestas sin excusa en general. No quiero que también sea mundialmente conocida por esta asquerosidad...
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