Venga, que aquí llega otra crítica más y esta ya se ajusta más a mis cánones de tardanza en publicarla (ya llevo más de la mitad del siguiente libro que empecé :S). Pero la cosa es que pueda hablaros de los libros que me voy leyendo para que juzguéis si os podrían gustar o no, que leer es una de las mejores actividades de la vida y eso si que lo recomiendo sin reservas, pero cada uno debe leer lo que le guste.
Título: El restaurante del fin del mundo (The Restaurant at the End of the Universe)
Autor: Douglas Adams
Editorial: Anagrama
Colección: Compactos
Páginas: 203 (33 capítulos)
Precio orientativo: 7,50€
Este libro es muy chiquitín, para lo que suelo leer yo normalmente xD. Letra grande, vocabulario ligero... El libro perfecto para llevar a la playa. Y no es que yo lo haya hecho, no he ido a la playa, pero desde luego es más ese estilo de libro que lo que pueda ser un tocho enorme y de lento desarrollo.
Se trata de la segunda parte de la "trilogía en cinco partes" que Douglas Adams comenzó con la Guía del Autoestopista Galáctico. Continúa exactamente donde terminó este último, con los protagonistas a bordo del Corazón de Oro, su nave intergaláctica propulsada con energía de improbabilidad, de camino al restaurante del fin del mundo a comer algo, después de haber presenciado la destrucción de la Tierra y haber averiguado el propósito de nuestro azulando planeta. Ah, y por supuesto, después de conocer la respuesta última de la vida, el universo y todo lo demás, o sea, 42. Pero ¿y la pregunta última?
En la historia conoceremos un poco más las motivaciones del excéntrico Zaphod, el expresidente de la galaxia. Observaremos al pobre Arthur Dent que sigue sin comprender absolutamente nada del basto universo en el que se ve obligado a sobrevivir. Y por supuesto seguiremos preguntándonos el porqué de esa última respuesta.
Al igual que su primera parte el libro tiene un desarrollo muy ágil, predominando los diálogos a las descripciones, al fin y al cabo es el estilo de Adams. No pretende ser un clásico de la literatura y, aun así, la pentalogía se ha convertido en una serie de culto dentro de la cultura geek, que consideran a Adams como el Lewis Carrol de nuestro tiempo.
Yo no llego a tanto, ya sabéis que a mi lo que me gusta es la historia en si misma, más que la forma. Y por supuesto no comparo autores ya que opino que no todo lo que escriba un autor tiene que ser igual de bueno o malo que el resto de sus obras, aunque si que nos puede ayudar a elegir cosas de nuestro gusto si conocemos parte de la obra de un autor.
Pero me estoy desviando. ¿Recomendaría el libro? Hombre, he de reconocer que me ha gustado algo menos que la primera parte. Digamos que se me ha hecho un poco más pesada. Puede que sea porque el personaje de Zaphod no me termina de agradar. Si que es cierto que cuando la historia pasa a otros personajes se me hacía más llevadera.
Además puede que, incoscientemente, lo esté comparando un poco con los libros que le rodean en orden y que uno me encantó y el otro me esta encantando. Lo cierto es que no me llamaban tanto sus párrafos como si lo han hecho otros libros.
En definitiva, yo pienso seguir con la pentalogía, en general la temática y la historia me gustan. Además no sería un buen geek que celebra el día de la toalla si no lo hiciera con propiedad. Lo recomendaría a gente que quiera pasar un rato entretenido ya que el libro esta lleno de humor, autocrítica al ser humano y se lee muy bien. También lo recomendaría a quienes hayan leído la Guía y les haya gustado. Pero si lo que buscáis son historias profundas, de gran belleza artística y complejidad moral, no os acerquéis a este libro porque no os gustará nada. Bueno y por supuesto, si os llama la atención pero no habéis leído la primera parte, aunque hay quien dice que las 5 partes se pueden leer en cualquier orden, yo recomendaría empezar por el principio.
Y nada más por mi parte, bueno si, solo preguntaros, ¿cuál creéis vosotros que sería la Pregunta Última que Pensamiento Profundo no fue capaz de dar y cuya respuesta es 42? (y no, no vale "¿cuánto es seis por siete?" xDD.
Se trata de la segunda parte de la "trilogía en cinco partes" que Douglas Adams comenzó con la Guía del Autoestopista Galáctico. Continúa exactamente donde terminó este último, con los protagonistas a bordo del Corazón de Oro, su nave intergaláctica propulsada con energía de improbabilidad, de camino al restaurante del fin del mundo a comer algo, después de haber presenciado la destrucción de la Tierra y haber averiguado el propósito de nuestro azulando planeta. Ah, y por supuesto, después de conocer la respuesta última de la vida, el universo y todo lo demás, o sea, 42. Pero ¿y la pregunta última?
En la historia conoceremos un poco más las motivaciones del excéntrico Zaphod, el expresidente de la galaxia. Observaremos al pobre Arthur Dent que sigue sin comprender absolutamente nada del basto universo en el que se ve obligado a sobrevivir. Y por supuesto seguiremos preguntándonos el porqué de esa última respuesta.
Al igual que su primera parte el libro tiene un desarrollo muy ágil, predominando los diálogos a las descripciones, al fin y al cabo es el estilo de Adams. No pretende ser un clásico de la literatura y, aun así, la pentalogía se ha convertido en una serie de culto dentro de la cultura geek, que consideran a Adams como el Lewis Carrol de nuestro tiempo.
Yo no llego a tanto, ya sabéis que a mi lo que me gusta es la historia en si misma, más que la forma. Y por supuesto no comparo autores ya que opino que no todo lo que escriba un autor tiene que ser igual de bueno o malo que el resto de sus obras, aunque si que nos puede ayudar a elegir cosas de nuestro gusto si conocemos parte de la obra de un autor.
Pero me estoy desviando. ¿Recomendaría el libro? Hombre, he de reconocer que me ha gustado algo menos que la primera parte. Digamos que se me ha hecho un poco más pesada. Puede que sea porque el personaje de Zaphod no me termina de agradar. Si que es cierto que cuando la historia pasa a otros personajes se me hacía más llevadera.
Además puede que, incoscientemente, lo esté comparando un poco con los libros que le rodean en orden y que uno me encantó y el otro me esta encantando. Lo cierto es que no me llamaban tanto sus párrafos como si lo han hecho otros libros.
En definitiva, yo pienso seguir con la pentalogía, en general la temática y la historia me gustan. Además no sería un buen geek que celebra el día de la toalla si no lo hiciera con propiedad. Lo recomendaría a gente que quiera pasar un rato entretenido ya que el libro esta lleno de humor, autocrítica al ser humano y se lee muy bien. También lo recomendaría a quienes hayan leído la Guía y les haya gustado. Pero si lo que buscáis son historias profundas, de gran belleza artística y complejidad moral, no os acerquéis a este libro porque no os gustará nada. Bueno y por supuesto, si os llama la atención pero no habéis leído la primera parte, aunque hay quien dice que las 5 partes se pueden leer en cualquier orden, yo recomendaría empezar por el principio.
Y nada más por mi parte, bueno si, solo preguntaros, ¿cuál creéis vosotros que sería la Pregunta Última que Pensamiento Profundo no fue capaz de dar y cuya respuesta es 42? (y no, no vale "¿cuánto es seis por siete?" xDD.
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