jueves, 30 de abril de 2015

Altibajos diarios, diario de altibajos

Soy un desastre, lo se. Una semana sin escribir por aquí... pero os prometo que estoy trabajando para rellenar los huecos. Para eso están los puentes ¿no? Bueno, para eso, para hacer exámenes y para rellenar curriculums varios :S. Pero es lo que toca y aún así supongo que me permitirá un merecido descanso.
Hoy ha sido un día... de altibajos. Empezó bien, con un "click" en la cabeza, camino al trabajo, de esos que tu mismo notas cómo una buena idea empieza a fluir en tu mente y a la que sólo le falta darle la forma perfecta. No se si lo conseguiré y tengo muy claro que es algo a muy largo plazo, le faltan, por lo menos,  un par de años. Aunque probablemente sea mucho más. Pero es algo que quiero hacer y que espero concluir con éxito. Es probable que esto sea mi mayor reto para los próximos años, lo suficientemente complicado como para que tenga escasas posibilidades de éxito pero lo bastante razonable como para planteárselo en serio. De momento me lo guardo como "patente en trámite" pero si me pongo con ello os daré más información.
Luego el día cayó en picado, y eso que fue bastante productivo. Uno de esos días en los que te hacen sentir como una mierda. Uno de esos días que definen la rutina de los "comemierda". Hasta uno de esos momentos, de mis favoritos, en que te describen la forma en que se llegó a uno de tus descubrimientos, como si tu no hubieras participado...
Y con la tarde no fue más que a peor la cosa. Pero es lo que tiene que no consideren tu trabajo con la complejidad que tiene. ¿Qué le vamos a hacer cuando dejar un cultivo encima de una mesa durante una semana tiene más importancia que analizar la secuenciación posterior teniendo que inventarse algoritmos que permitan obtener conclusiones correctas? Al fin y al cabo, lo hace la máquina ¿no?
Pero bueno, por suerte el día remontó hacia el final y es que una buena charla anima, para qué nos vamos a engañar. Si hay que sacarle un "pero" es que las mejores chicas siempre tienen pareja, menos mal que a mi ya no me preocupan, ni afligen, esas cosas.
En fin, es hora de irse a la cama, no sin antes pasar por Amazon a ver si realizo o no un pedido literario. Depende cómo estén los precios y si encuentro lo que busco. De momento tengo lectura más que de sobra, pero nunca se sabe cuando se terminará. Las entradas las iré poniendo en sus días correspondientes así que, si queréis seguirlas es probable que os toque bucear un poquito (igual las pongo "promocionadas" unos días para evitarlo, no se, ya veré).

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